Como ya comenté en uno de mis posts, en el cine y en la literatura, abundan las tramas sustentadas por protagonistas con un trastorno psicológico. Últimamente, el trastorno psiquiátrico forma parte de las tramas de numerosas novelas. La razón no es otra que la posibilidad que brinda manejar tramas efectistas y tramposas, para luego, al final de la cinta o libro, revelar la verdad.
La literatura sobre el tema psiquiátrico es mucho menor que la filmografía porque analizar la psiquiatría desde un punto de vista literario es mucho más complicado que mostrarla. Y si no crees lo que digo, echa un vistazo a este trailer:
Por fortuna, hay excepciones, y muy buenas. En algunos casos hablo de escritores que han sabido introducirse en las mentes de las personas aquejadas de esta enfermedad y retratárnoslas tan bien que nos despiertan emociones. En otros casos, son los mismos escritores, aquejados de esta enfermedad, quienes nos han transmitido en sus obras la realidad del día a día, sus sentimientos, sus impresiones, sus pensamientos y sus actos.
¿Damos un repaso a algunas de estas novelas?
1.- Los Renglones Torcidos de Dios.
No podía faltar, la obra insignia de la literatura española en este género. Novela escrita por Torcuato Luca de Tena y publicada en 1979. Para escribirla, el autor ingresó durante 18 días en un sanatorio mental, con el fin de conocer de primera mano a los enfermos mentales que le servirían para perfilar sus personajes. El ingreso también le permitiría conocer las condiciones de vida dentro de los manicomios.
La novela cuenta cómo Alice Gould, una elegante mujer de elevada posición social, es ingresada en un psiquiátricol. Ella afirma ser una detective, que ingresa por voluntad propia por encargo de un cliente, que le ha solicitado el esclarecimiento de un crimen. Sin embargo, los informes médicos dicen que Alice es una paranoica que pretende asesinar a su marido. Ella lo niega todo, por supuesto; afirma que se trata de una argucia que tuvo que realizar para que se autorizara su ingreso en el manicomio.
Alice no concuerda con el perfil medio de los enfermos del sanatorio: se trata de una mujer extraordinariamente culta e inteligente, conocedora de artes marciales y técnicas de defensa personal, y posee un agudo ingenio con brillantes destellos de lucidez mental. Todo esto apoya la teoría acerca de la detective privada, y hará que los médicos empiecen a preocuparse: ¿está Alice realmente loca, o su extraña historia es verídica? Al tratarse de una mujer de posición acomodada, ¿no habrá intentado engañarla su marido, fingiendo un caso extraño, para ingresarla en el manicomio y apropiarse de todos sus bienes? ¿Es cierta la historia del crimen, y de las cartas amenazantes escritas aparentemente por alguno de los enfermos mentales? Todas estas incógnitas se mantendrán hasta el final de la novela.
2.-Monte Miseria.
Se trata de la continuación de la primera novela del escritor, Samuel Shen, “La Casa de Dios”. En ambas novelas, el autor opta por el humor y el sarcasmo. Su lectura es ágil y el texto es provocativo. Se centra en el negocio que es la salud en estos días.
Centrada en el actual negocio de la salud, el protagonista, Roy Basch está en el hospital Monte Miseria. Se imagina un futuro deslumbrante: se especializará en psiquiatría en un hospital de prestigio. Por desgracia, todo se derrumba cuando el doctor Ike White, su admirado supervisor, se suicida. A partir de esa muerte, Roy Basch se planteará un interrogante que sobrevolará a lo largo de la novela.
Me horrorizó —dice— la idea de que estaba matándome para aprender una profesión que se suponía evitaba que la gente se matase, pero cuyo experto mundial acerca de cómo hacerlo me había estrechado la mano a las diez y media de la noche y a las once de esa misma noche esa misma mano estaba metiéndose en la boca las pastillas necesarias para darse muerte, cosa que a la mañana siguiente negaban todos los demás expertos mundiales que me estaban enseñando psiquiatría.
La salud mental en Monte Miseria se rige por las leyes del mercado. Todos los internados son medicados a mansalva. Las terapias no están sujetas a las características de cada enfermo sino al monto que por ese paciente/cliente cubre el seguro. Un borderline hoy puede ocupar una cama en la sala de alto riesgo y mañana ser dado de alta sólo porque se precisa esa cama para un paciente-cliente con una cobertura mayor. A lo largo de casi setecientas páginas, Roy Basch te hace cómplice de las grandezas e infortunios que vive en el interior del hospital psiquiátrico.
3.- Falsa memoria.
Escrita por Dean Kootz. Se trata de una novela magistral, personajes fuertes y un nudo resuelto de una manera tan lógica que seguramente repetirás con este autor.
Martie y Dusty forman un matrimonio feliz. Una felicidad apenas enturbiada por la feroz agorafobia de Susan, la mejor amiga de Martie, y los problemas mentales de Skeet, el hermanastro de Dusty.
Afortunadamente, ambos están al cuidado –Susan desde hace tiempo, Skeet después de un episodio psicótico- del doctor Mark Arriman, un famoso y competente psicólogo, tan inteligente como encantador. Sin embargo, Dusty duda. En un principio, desconfía de los desarreglos mentales de Susan y Skeet. Más tarde, de los que empezará a sufrir su mujer. Y un poco más tarde, de sus propios e inexplicables lapsus.
Todo esto le lleva a pensar que Arriman tiene mucho que ver. Y de este modo, a medida que sus sospechas se convierten en certidumbre, Dusty y su mujer se van adentrando en un universo de pesadilla.
4.- La campana de cristal.
De Sylvia Plath.
Te narra la historia de Esther Greenwood ,una joven universitaria que recibe un premio consistente en vivir unos meses en New York y conocer los entresijos del mundo editorial.
Durante esos meses vive una vida regalada, llena de lujos y atenciones. En estas primeras páginas, empieza a surgir otra Esther, apabullante y tenaz en su vida interior.
Su existencia es una sucesión de tensiones morales, sociales, de imposiciones escritas y no escritas; de tabúes sexuales; de costumbres rurales en un mundo cambiante; de sueños incumplidos; de necesidades vitales apartadas; de anhelos desesperados… Y de miedo, de mucho miedo por la vida.
Al acabar su estancia en New York, debe volver a su pueblo, donde caerá sobre ella todo el peso de la realidad, cierta o no.
Empieza entonces un recorrido por varias clínicas psiquiátricas hasta que es tratada por la Dra. Nolan, una mujer inteligente que la ayuda a recuperarse.
5 .– La psiquiatra
Escrita por el alemán, Wulf Dorn.
La protagonista, Ellen Roth, es una psiquiatra ejemplar con una gran carrera profesional, muy respetada en la Clinica del Bosque. Normalmente, sabe mantener el límite entre su vida profesional y la personal, e intenta no dejarse influir demasiado por sus pacientes; pero eso cambia cuando una misteriosa mujer ingresa en el psiquiátrico. Se trata de una paciente maltratada y aterrorizada que teme ser secuestrada por el hombre del saco.Se lo susurra a Ellen y luego desaparece sin dejar rastro.
Para cuando se da cuenta, Ellen está demasiado involucrada en el caso y sabe que la única manera de salvar la vida de su paciente es jugar a un macabro juego para descubrir el paradero de la paciente misteriosa.
¿Y tú? ¿Qué novelas de suspense has leído en la que la trama estaba relacionada con el mundo de la psiquiatría?
Si quieres saber más sobre novela de suspense con renglones torcidos, echa un vistazo a este post y a este.
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